Ser profesor de Yoga
Te has puesto a pensar:
1. ¿Cómo es que la persona
que te ha enseñado yoga llegó a ese punto?
2. ¿Qué hace que alguien
quiera enseñar yoga?
3. ¿Es el yoga una profesión
como cualquier otra?
4. ¿Ha habido siempre
maestros de yoga como los hay ahora?
La práctica del yoga lleva
varios milenios de existencia y originalmente el conocimiento se transmitía de
la manera tradicional: de uno a uno, de maestro o gurú a discípulo, y de
discípulo a otro discípulo, dentro de una cadena donde el linaje se mantenía
con claridad. El discípulo sabía de dónde venía su maestro y quien era el
maestro del maestro del maestro.
Hoy en día muchos
practicantes de yoga desconocen el nombre de su maestro, un día conocen a uno,
otro día a otro y mucho menos conocen quien es el maestro de su maestro. Saber
el linaje del maestro, con quien o donde estudió y que enseña, es algo que
puede pasar casi desapercibido en el mundo moderno del yoga, pues asistir a una
sesión de yoga se ha convertido, hasta cierto punto, en recibir más un servicio
que una enseñanza. Si el servicio que se recibe es bueno no es necesario saber
el nombre del instructor, dónde y que ha
estudiado o quienes han sido sus maestros, aunque saber quién es el instructor
al menos su nombre ayuda a establecer una relación de confianza.
Sin embargo, el yoga puede ir más allá que ofrecer solo un servicio que promueve únicamente bienestar físico, el yoga puede
convertirse en una enseñanza, es decir; en un conocimiento amplio que además de
surtir efecto en el momento que se practican algunos estiramientos y
relajaciones deja conocimientos sólidos que se aplican en las diferentes áreas
de la vida del practicante y cuyos resultados son también corto plazo
y mediano plazo a favor de una vida más plena, a nivel físico, emocional, mental y social. Un servicio es algo efímero, una enseñanza es algo que crea raíces.
Como instructora de Yoga me gusta guiar y corregir correctamente a los alumnos, mi intención es que aprendan y disfruten durante la clase |
Hay personas que se
sienten satisfechas con solo recibir de vez en cuando un buen servicio como una
clase de yoga, hay otras en cambio, que quieren saber más y entender más, tienen
preguntas y no solo necesidades. Hay instructores que se limitan a compartir una habilidad física para ser parte de una cadena de bienestar,
mientras que hay otros que además de generar este bienestar quieren dejar algo más
profundo o sutil y ayudar a la
comprensión de lo maravilloso de la vida humana.
Quienes desean compartir
una enseñanza más completa, e incidir en que los practicantes tengan
herramientas para transformar sus vidas y no solo sus cuerpos, requieren de una
preparación más amplia, más meticulosa. Ser un maestro de yoga tomará entonces
más tiempo, tendrá que surgir primero el amor por la práctica del yoga, después
investigar sobre linajes, tradiciones, maestros y contenidos. Encontrar el
método o sistema que resuene con lo se busca, después habrá que soltar la prisa
y adquirir disciplina, paciencia y humildad, pues quien desea ser maestro
tendrá que estar dispuesto a ser siempre un alumno.
Los primeros maestros
indios que dejaron su enseñanza en occidente como Swami Sivananda, BKS,
Iyengar, Pattabhi Jois, Desikachar e Indra Devi, para mencionar a unos cuantos,
quizá no tenían la menor idea de que su conocimiento iba a formar parte de un
extenso legado bajo el cual se estarían formando cientos y cientos de maestros
de yoga en el mundo entero.
Para quienes somos
maestros de yoga y para quienes quieren convertirse en maestros de ésta seductora disciplina, lo más importante es
honrar a los linajes, profundizar en los métodos, y después llegar a explorar y
a aportar; y todo esto, requiere de tiempo. Enseñar o practicar
yoga no es aprender posturas ni a movernos de una u otra forma, se trata de
comprender y honrar lo precioso de la vida humana, conocer y entender la
sabiduría que hay en el cuerpo y estar dispuestos a ser seres humanos íntegros y felices.
Como ejercicio curioso:
¿Sabes el nombre de tus
maestros y de que linaje vienen?, si ya eres maestro: ¿sabes quiénes son o
fueron los maestros de tus maestros?
La tradicional pregunta,
¿Quién es tu maestro y qué enseña?
La practica de las asanas ayudan al alumno para que comprenda lo asombroso de la vida humana y lo fuerte que pueden ser tanto fisico y metal, sin prejuicios |
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